LO MÁS "HOGIBLE" DE MI VIDA

Anoche Xiao tuvo uno de los ataques que yo llamo "de duelo". A veces le entra una angustia terrible y una necesidad de llorar imperiosa, llorar a voces, lamentarse, casi, casi gritar de dolor. Suele buscar un motivo para que ese llanto llegue, y se convence y quiere convencerme de que echa de menos....... a veces es nuestro viejo coche, otras un objeto desaparecido..... anoche fue un peluche; uno con el que nunca jugó y al que jamas hizo ni puñetero caso; uno que hemos entregado, junto con otro montón de juguetes, a una asociación antes de la llegada de los Reyes Magos.´
Empezó en el salón, antes de subirse a dormir. Traté de contenerla, pero la marea venía inevitable y con furia. Así que subí con ella a su cama y allí la dejé llevarse y le dije que llorase lo que necesitara, que se desahogara. La abracé y así nos mantuvimos hasta el final. Y vaya si lloró, chilló, "que echaba de menos a su peluche perrito", "que no quería que su perrito peluche estuviera con otro niño", "que quería que güelviera"....... y llanto y llanto y llanto...... cuando empezó a tranquilizarse, a razonar y a poder hablar me dijo:
Xiao: Mamá, en China yo lloraba y estaba sola, sin madre ni nadie. Y lloraba y lloraba y nadie me abrazaba.
Mamá: ¿Y te sentías muy mal?
Xiao: Muy mal, fatal, hogible, lo más hogible que me ha pasado en mi vida.
Mamá: Pero ya tienes madre y padre, así que abrazate fuerte, fuerte y llora si lo necesitas.
Xiao: Te echaba de menos cuando estaba en China, te nesesitaba y no llegabas...... hogible, era hogible de verdas.
Apretó el abrazo y fue relajando cuerpo y alma hasta dormirse.