jueves, 24 de febrero de 2011

ORIGEN, RAICES E IDENTIDAD

En uno de los blogs que sigo, Reeducando a mamá, se ha suscitado un pequeño debate por el tema de los orígenes, raices e identidad de los hijos adoptados. Es un tema que me ha hecho reflexionar mucho y sobre el que me he parado a pensar en muchas ocasiones.
Mi hija es de origen chino, nacida en China, de étnia....¿?  lo desconozco, aunque por estadística debe pertenecer a la etnia han. Pero mi hija, hoy por hoy es española de pleno derecho, no china.
La vida de mi hija empezó en el vientre de una mujer de la que no sé nada y de la que tengo poquísimas probabilidades de saber nunca, las mismas escasísimas probabilidades que tendrá mi hija en el futuro de saber algo sobre ella. Yo intento dársela, intento que forme parte de su vida y de la mía, con respeto, con delicadeza, pero sin negar lo evidente, sin competir y sin temer. Y cuando hablo de dársela hablo de enseñarle un camino, de entregar una información que su cabecita infantil no puede imaginar por sí misma. No puedo darle más, por que para mi, para el mundo, la vida de mi hija empezó un día de octubre cuando apareció abandonada en la puerta de una vivienda en un pueblo de China. De lo anterior a eso no hay nada. No sabemos donde nació, cuando nació ni de quien. NADA.
Vivió 2 años y 6 meses y 13 días en un orfanato, rodeada de otros niños y de alguna cuidadora. De esos días ella tiene un recuerdo (o quizá debería llamarlo sentimiento) de soledad y de miedo y nosotros la poquísima información que el personal nos facilitó. También media docena de fotos (una de ellas de bebé) que la directora me envió a petición mía y que siempre le agradeceré profundamente.
De esos orígenes, de esa corta historia conocida, mantengo contacto con 4 personas; la directora del orfanato (y a través de ella con la última cuidadora de Xiao), con 3 de sus compañeros de orfanato, el más fluido y frecuente con una niña que entró un mes antes que Xiao y salió un par de meses también antes que mi hija; son de la misma edad y siempre estuvieron juntas.
En nuestros orígenes empezamos a enraizar, a echar raices. Pero a Xiao la sacamos de su bosque y la tragimos a otro. Pretender que sus raices sean sólo las de sus orígenes sería como aislarla, dejarla en una macetita sola y limitarse a regarla. Llegaría un momento que no sería ni de quí ni de allí. Mi hija está echando sus raices nuevas aquí, y esas raices se nutren de las nuestras, de las de su familia, de las de su entorno. Dice el refrán que uno no es de donde nace sino de donde pace. Y cada día tengo más claro que es cierto. Mi hija celebrará el año nuevo el 1 de enero y comerá 12 uvas; mi hija vestirá el traje regional de nuestra comunidad; mi hija celebrará su santo junto con el mío y el de su abuela como es tradición en nuestra familia, en su familia; mi hija recibirá regalos de los Reyes Magos; mi hija, si algún día quiere, estudiará chino como ........ ¡¡¡¡tercera lengua!!!!  ya que habla español y en el colegio está aprendiendo inglés. Las raices crecen a lo largo de la vida, cambian, se renuevan. Y no es diferente en las personas. Los lugares y las personas con las que vivimos son las que nos aportan para que esas raices crezcan. No se puede vivir de las pequeñas raices que  uno trae de su origen.

El puzzle de su identidad lo irá completando ella poco a poco, pero será quien sea por haber crecido aquí, por ser hija mía y de su padre, por tener los abuelos que tiene, los tíos y primos, por tener los amigos que tiene. Y mi hija la está creando con esas pocas y pequeñas raices que traía de sus orígenes y con las que están creciendo, con las que le estamos dando y nutriendo, su familia y todo su entorno. Esas pocas raices que vinieron con ella las intento preservar, que no las pierda y que las tenga siempre presentes, pero no puedo pretender que aquí, desarrolle raices de allí. Es imposible: yo no me puedo volver china por ser madre de una china.

5 comentarios:

  1. La claridad con la que tenemos que afrontar la vida compleja de nuestros hijos adoptados no está en todas las familias...En el blog "Hongmihijo" (http://hongmihijo.blogspot.com/2011/02/nina-y-rubia.html) se expone un caso real, del siglo 21 aunque más parece un caso sacado de los años 50 en la España de la hipocresía y el tabú...
    Yo no puedo hacer particiones...su vida pasada es la nuestra y la tenemos que adoptar también, desde el inicio, otra cosa sería absurdo...
    Es que yo amo la tierra de mis dos hijos, la quiero como la mía...igual que quiero la tierra de mi marido, siempre la quise porque él era de allí, y mis hijos son de más allí...
    Hay que empatizar con las mujeres que los parieron...con los padres que los sembraron...sea cuales fuera sus circunstancias...hay que aprender a pensar bien de ellos, aunque eso no quita que, a veces, mis pensamientos discurren por derroteros un tanto pesimistas sobre ellos...es inevitable...de eso ya hablaré algún día...
    En fin que...los orígenes de cada cual está ahí y son parte de nosotros...y lo serán siempre...y los hay que respetar...aunque claro, ell@s son de aquí y en esta tierra se crian, crecen y se hacen personas...Yo siempre la digo a mi hija que tiene mucha suerte por ser de dos sitios o mejor de tres...China, España y el Pais Vasco, la tierra de su padre...y ella se siente tan orgullosa...se siente completa y especial por poder tener tres tierras...
    Nuestros hijos son del mundo que es lo que yo al final le digo...igual que todos...el mundo es nuestra casa, en la que vivimos y en el mundo cabemos todos...y nos hace estar cerca de todos los lugares de la tierra...

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  2. Hace muchos dias que pienso en hacer una entrada sobre este tema en mi blog, sobre el tema de los orígenes y cómo tratarlos... pienso mucho en ello...Estoy completamente de acuerdo con Mei.
    Yo pienso que los orígenes, las raíces, sí forman y formarán siempre parte de nuestros hijos pero eso no evitará que sean de aquí,que tengan la mayor parte de su historia, de su vida aquí y sean españoles, vascos o catalanes de pleno derecho... pero tienen sus raíces, una raíz biológica inevitable, un parecido físico(que no es de aquí), unas vivencias culturales durante los primeros meses o años de su vida (o incluso durante su época prenatal) que nos son de aquí pero creo que pueden llegar a influir bastante en ellos, en su presente y en su futuro. Nosotros y nosotras como padres y madres trabajaremos toda nuestra vida para que integren esa parte de su vida, para que la asuman y la entiendan, incluso para que la amen. Y por supuesto trabajaremos para que sean nuestros hijos, para que sean españoles, para que contruyan su propia vida y su propia indentidad a partir de todos los factores que forman parte de ellos como individuos.
    Yo siento que mi hijo es quien es (o será quien será) porque nació donde nació, porque lo parió quien lo parió (y lo cuidó durante el tiempo que pudo estoy segura de que lo mejor que pudo) y porque yo soy su madre, y su familia es la que es. Todo lo que forma o ha formado parte de su vida les indentifica.

    Besos.

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  3. Estoy totalmente de acuerdo contigo, nuestras hijas son niñas nacidas en China pero españolas.
    Yo intento también que no olvide donde ha nacido pero no puedo transmitirla una cultura que no es la mia ni la suya y que desconozco totalmente.
    Un saludo
    maría

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  4. En ese mismo blog acabo de leer un comentario que me ha parecido muy acertado...y que ha utilizado la palabra "ingertar"...es cierto, nuestros hijos se ingertan en nuestra vida o al revés, nosotros nos ingertamos en su vida que empieza a discurrir con dos savias mezcladas...y ya se sabe que si el ingerto se hace bien y con todas las garantías, los frutos suelen ser más ricos y sabrosos...me ha gustado mucho esa palabra "ingertar"...

    Cuando llegó mi hija y me decían "es china?"...yo muy solemne y casi un poco molesta, contestaba.."sí, y española"...Ya he dejado de dar ese tipo de respuestas a la gente...La que tiene que saber bien que tiene dos identidades o las que sea, es ella...os daréis cuenta que para los demás o para muchos son "chinas", es lo que surge a primera vista...Es en el seno familiar en donde hay que dejar bien claro lo de las dobles existencias, al menos en mi caso, porque ella incluso se siente más satisfecha de ser china que otra cosa, ama a su pais de nacimiento, será lo que le he inculcado porque yo lo amo tremendamente. Soy yo la que le tengo que recordar que tambien es española y que lo mejor es ser las dos cosas, que es lo más chulo, como su padre...(esto lo hago con mucha discrección para que no tenga el efecto contrario y quiera dejar de ser española)...Hay que andarse con mil ojos!!!

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  5. Me gustaría que leyeseis la última entrada de este blog http://ethiopia.limbo13.com/?lan=spanish
    Trata sobre el mismo tema. Un beso.

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